Ya queda menos para cumplir 2 años con vosotros... 2 años llenos de alegrías, tristezas, triunfos y derrotas. Quien me iba a decir que un capricho tonto se iba a convertir en algo tan grande...
Muchos problemas tuve, pero gracias a vosotros superé gran número de ellos. Muchos complejos tengo, pero gracias a vosotros, puedo dejarlos a un lado. Muchos fallos cometo, pero con vosotros, todo es enmendable. Muchas alegrías hemos vivido, y es que con vosotros sabe mejor. Muchas victorias hemos saboreado, pero las que vengan sabrán mejor. Muchas veces hemos caido al suelo, otras tantas nos hemos levantado.
Y es que cualquier cosa que ponga sobre vosotros se queda pequeña porque este equipo, es lo más grande que he visto jamás... ni fútbol, ni baloncesto, ni siquiera mi estimado y extrañado balonmano. Solo hay
RUGBY, mucho rugby.
Aun recuerdo como si fuera ayer, aquel llamamiento de un tal
Raul via Tuenti... un chico con ganas de formar un equipo de rugby aqui, en Plasencia, a principio de Mayo de 2010. Seguro que muchos se rieron, pero que cara se les debió quedar, porque aquel dia que nos citaron, aparecimos los primeros -más de 15- irlandeses. Unos se fueron, otros se quedaron... yo puedo decir, que estoy orgullosísimo de estar desde el dia 1, de formar parte de la historia de este club, y de poder seguir formando parte de la misma muchísimo tiempo más si se me permite hacerlo.
Primeros "irlandeses" del Valle.
Y es que el rugby es algo que no se puede explicar con palabras -como dice el buen video de
"Como puedo explicar..."-, es algo que hay que probar, que hay que practicar, que hay que sufrir, que hay que disfrutar.
Fugazmente, mientras escribía todo esto, otro grandioso, memorable e imborrable recuerdo llegaba a mi cabeza... Nuestro debut. Nuestro primer partido, contra nuestros hermanos del
Villanueva R.C. -ahora
Vegas Altas- en Villanueva, tal que un
12 de Noviembre de 2010. Qué gran día aquel... qué gran partido, qué gran tercer tiempo -anecdota personal incluida- y por supuesto, qué gran expeciencia. Aun se me ponen los pelos de punta, cuando en el último minuto, nuestro medio melé,
Soma, falló una patada a palos que pudo habernos dado la victoria, aquel momento en el que él se emocionó al fallar, y todo el equipo corrio a arroparlo, aquel dia en el que empatamos 11 a 11, aquel momento, en el que yo, contagiado por la emoción al finalizar el partido -como todos-, me abrazaba a
Jesús, luego a
Soma, a
República... Son demasiados momentos para rememorar con palabras... Y lo mejor que puedo hacer, es rendir tributo a todos vosotros, porque sin vosotros, no sería nada, esto no tendría sentido... Hoy y siempre:
¡IRLANDESES!
Segunda generación de "irlandeses".
